El entrenador John Wooden aconsejaba a sus jugadores a preocuparse más por su carácter que por su reputación. “El carácter,” decía, “es lo que eres en realidad, en tanto que reputación es meramente lo que otros piensan que eres.
Eso se aplica al ser humano, pero, ¿sabía que también se aplica a Dios? Dios tiene carácter, quién es él en realidad; y Dios tiene reputación, cómo otros lo describen. Sobra decirlo, la gente dice de Dios muchas cosas que no son verdad. Si usted quiere conocer a Dios, descubra en la Biblia quién es él EN REALIDAD, en lugar de simplemente por lo que oye.
Le habla David Jeremiah animándole a que tome el camino a una vida nueva. Descubra el carácter de Dios . . . en su Minuto en la Biblia.