Un proverbio chino dice: “Si dos hombres alimentan a un caballo, perderá peso; si dos hombres cuidan de un barco, pronto tendrá filtraciones.” En otras palabras, si es tarea de todos alimentar al caballo, no es tarea de nadie. Y si es tarea de todos cuidar del barco, no es tarea de nadie.
Aplicando la misma idea al servicio cristiano y otras responsabilidades en la vida, significa que a menudo cosas importantes quedan sin hacerse. Más bien, pídale a Dios que le muestre específicamente lo que él le ha llamado a hacer. Por su fidelidad, por lo menos esa tarea o responsabilidad específica se hará.
Le habla David Jeremiah animándole a que tome el camino a una vida nueva. Descubra el llamamiento de Dios . . . en su Minuto en la Biblia.