Para la mayoría de las personas, el temor a la muerte no es su temor más fuerte, pero cae entre los primeros temores en la lista. Si uno vive su vida por la vista y su vista se va, es atemorizante. Pero si vive su vida por fe, entonces la muerte no es motivo de temor. La muerte no tiene poder sobre la fe. Génesis 23:1-20; 25:7-11