El Apóstol Pablo estructuró varias de sus cartas en dos partes: La primera parte doctrina y la segunda parte la práctica. El autor de Hebreos hace lo mismo. Comenzando con el capítulo 10, hay una transición de presentar teología a demostrar su implementación—una forma de vivir que refleja lo que Cristo ha hecho en nuestras vidas. Hebreos 10:19-25