En mil ochocientos ochenta y nueve, Asa Candler quedó como único propietario del producto que ahora conocemos como Coca-Cola. Cuando algunos hombres de negocios de Chattanooga le pidieron licencia para embotellar la bebida, les vendió ese derecho por un dólar; sin duda para lamentarlo para siempre.

No es raro que las personas devalúen algo que vale mucho. El Nuevo Testamento dice que Dios ha depositado el Espíritu Santo en todo creyente; y luego advierte en cuanto a hacer algo que pudiera denigrar ese don de tan infinito valor. Si usted es cristiano, recuerde su valor y el valor de lo que le ha sido dado.

Le habla David Jeremiah animándole a que tome el camino a una vida nueva.. . en su Minuto en la Biblia.