Stan Musial, legendario beisbolista, fue el primero en recibir una paga de cien mil dólares en mil novecientos cincuenta y ocho. Se lo había ganado por su rendimiento. Al año siguiente, cuando su promedio cayó debajo de trescientos por primera vez en su carrera, pidió, y le concedieron, una rebaja de veinte mil dólares. Pensaba que no se había ganado el salario anterior.
Una petición así ni se oiría en la era actual de contratos deportivos de millones de dólares. Pero plantea una buena pregunta: ¿hacemos todo esfuerzo por darle a Dios, y a nuestro patrono, lo mejor de nosotros cada día?
Le habla David Jeremiah animándole a que tome el camino a una vida nueva. Descubra los valores de Dios . . . en su Minuto en la Biblia.