Tomás Jefferson preparó un libro recortando todas las enseñanzas morales de Jesús de los cuatro Evangelios y pegándolas en hojas limpias; proyecto que llegó a conocerse como la Biblia de Jefferson. No incluyó nada que tuviera que ver con milagros, lo sobrenatural o lo divino. Estas son las últimas palabras de la Biblia de Jefferson: “Allí pusieron a Jesús, rodaron una gran piedra sobre la entrada a la tumba, y se fueron.”

Para Jefferson, la vida de Jesús acabó con su muerte. Pero para los escritores de los cuatro Evangelios, Jesús resucitó de los muertos y ascendió al cielo, de donde volverá de nuevo.

Le habla David Jeremiah animándole a que tome el camino a una vida nueva. Descubra la Biblia sobrenatural de Dios . . . en su Minuto en la Biblia.